Sánchez toma el control del PSOE andaluz: «Sin Andalucía perdemos el Gobierno»

A medida que se acerca el 12 de junio, fecha en la que, tal como publicó OKDIARIO, se prevé se celebren las elecciones andaluzas, crece el miedo en el Palacio de La Moncloa. El candidato del PSOE de Andalucía, Juan Espadas, «no está funcionando» y el temor a que el mal resultado del ex alcalde de Sevilla se lleve por delante a Pedro Sánchez en las generales es cada vez más fuerte. El propio presidente lo ha expresado a su círculo más cercano: «Sin Andalucía perdemos el Gobierno».

Tan es así, que Ferraz ha decidido coger el timón de la campaña andaluza. Con el desembarco de prácticamente todos los dirigentes y estrategas en Sevilla. «Se les ve a menudo entrar y salir por la sede de la calle San Vicente», asegura un diputado andaluz. Algo que hacía años que no ocurría, con Susana Díaz como secretaria general.

Sánchez tutelará todo el proceso de configuración de las candidaturas del PSOE de Andalucía para crear un grupo a medida de Sánchez. Aunque no acaba de remontar en las encuestas y prácticamente nadie le conoce, más allá de Sevilla, donde fue alcalde, Espadas será el presidenciable que rivalizará contra Juanma Moreno.

Ferraz, tal como explicó este periódico, le busca un número dos mediático y potente que ayude a proyectar la imagen del candidato de aquí a las elecciones. De momento el PSOE de Andalucía rechaza poner sobre la mesa ningún nombre, aunque se han valorado ya algunos.

Como ya ocurrió en las elecciones madrileñas del 4 de marzo, con un fracaso estrepitoso del candidato socialista Ángel Gabilondo, la dirección federal del PSOE dirigirá todos los movimientos de cara a la próxima cita con las urnas en Andalucía. Uno de los principales, el de la configuración de las candidaturas, no se dejará únicamente a manos del candidato.

Desde ya hace días, varios dirigentes del partido se dejan ver casi a diario por la sede de la federación. Y se espera que su presencia vaya en aumento en las próximas semanas. «Se trata de evidenciar quién manda, Espadas no es más que un mero emisario» resume un socialista histórico.

Hasta ahora, Sánchez y Díaz tenían un pacto de no agresión sobre el cual la baronesa elegía quienes le acompañaban en el parlamento andaluz y el jefe del Ejecutivo quienes ocupaban un escaño en el Congreso y en el Senado. Con la elección de Espadas por parte de Sánchez, todo esto ha cambiado.

Una de las condiciones que le puso el secretario general del PSOE al ex alcalde de Sevilla cuando le encumbró para liderar el partido en esa comunidad fue que Ferraz tendría algo que decir en las listas autonómicas. No quieren repetir errores del pasado en una comunidad en la que el PSOE ha sido siempre muy autónomo.

Miedo a Vox

En Moncloa y en Ferraz dan prácticamente por seguro que el PP de Juanma Moreno ganará las próximas elecciones. Ya se resignan a eso. Pero el pánico llega al pensar que Vox puede quedar como segunda fuerza política y relegarles a una tercera posición que sería «un batacazo sin paliativos». La penetración de los de Santiago Abascal en el mundo rural, como se vio en las protestas de los agricultores y camioneros que ridiculizaron desde el Gobierno, es el principal miedo. Los socialistas quieren recuperar el control del voto rural.

Renovación

Espadas tiene un trabajo importante por delante si quiere un grupo parlamentario configurado a su medida. Cabe recordar que la mayoría de los parlamentarios socialistas actuales son personas del círculo de confianza de su antecesora, Susana Díaz, y uno de los objetivos del nuevo secretario general y de Ferraz -por mucho que parte de ellos hayan tomado distancias con la ex presidenta- es relevarlos de sus cargos.

Montero y Sicilia

Una de las grandes protagonistas de esta campaña electoral será, tal como ha avanzado este jueves este periódico, la ministra de Hacienda y Función Pública María Jesús Montero. Sánchez la proyecta ya como vicepresidenta económica de la Junta -su nombre llegó a sonar para ser la presidenciable- aunque sin incorporarla -salvo sorpresas- en las listas.

Quien si podría dar el salto de Madrid a Sevilla, en este caso como número uno por Jaén, es el actual portavoz federal, Felipe Sicilia, convirtiéndose así en uno de los hombres fuertes del PSOE andaluz. En su momento, Sicilia llegó a transmitir a su entorno que quería rivalizar con Díaz en las primarias, pero le hicieron desistir en el intento -aunque llegó a ser el favorito de Ferraz-.